El isopirazam, usado principalmente como fungicida de acción preventiva para el control de oídio y otras enfermedades en cultivos hortícolas y frutales, es la última materia activa en desaparecer de la lista de fitosanitarios autorizados en la Unión Europea. La Comisión ha aprobado el Reglamento de Ejecución (UE) 2022/782, por el que no se renueva la aprobación de esta sustancia.
El Comité de Evaluación del Riesgo de la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) adoptó un dictamente en el que conluye que el isopirazam, que pertenece al grupo químico de las pirazolcarboxamida, cumple los criterios para ser clasificado como carcinógeno y tóxico para la reproducción humana. Además, en los usos representativos, los residuos en alimentos y piensos superan los valores considerados de “exposición insignificante”.
Los países tienen hasta el 8 de septiembre para retirar las autorizaciones de los productos fitosanitarios, aunque pueden conceder un período de gracia que expirará el 8 de diciembre.