La próxima sesión del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos (SCoPAFF), que se celebra este viernes, 20 de mayo, debería respaldar la modificación del reglamento europeo para comenzar a aplicar el tratamiento de frío a las naranjas importadas procedentes de países con presencia de la falsa polilla Thaumatotibia leucotreta. De no aprobarse el cambio reglamentario, Intercitrus pedirá al ministro de Agricultrura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, que en el próximo Consejo de Ministros de Agricultura, el 24 de mayo, lidere una propuesta política en favor de esta medida.
Tras haber superado el periodo de exposición pública tanto en la UE como en la Organización Mundial de Comercio (OMC), Intercitrus recuerda que la medida debería entrar en vigor para cumplir con el compromiso transmitido por la propia comisaria de Sanidad y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, que avanzó por carta que esta comenzaría a implementarse “antes del comienzo de la nueva temporada comercial” de importación del hemisferio sur. De retrasarse aún más la aplicación, la propia Comisión podría incurrir en responsabilidades porque, de hecho y a petición suya, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) ya alertó en un dictamen el pasado verano del alto riesgo de que la plaga pueda instalarse en el territorio de la UE y recomendó aplicar este tratamiento, el más eficaz para evitar la introducción de la plaga.
La interprofesional citrícola española, “dadas las maniobras de las últimas semanas del lobby citrícola sudafricano en Bruselas”, insta a la Comisión a imponer su criterio y a hacer valer los estudios científicos de la EFSA y los requerimientos de la propia normativa europea, que exige en este caso “ausencia total de plaga” en las importaciones. “Si, pese a todo ello, la Comisión se deja llevar y no actúa el día 20, como sería su obligación y responsabilidad, el cold treatment debería ser defendido en un ejercicio de responsabilidad política que podría liderar el ministro español, Luis Planas –junto a sus aliados con producción citrícola Francia, Italia, Portugal y Grecia- en el marco del Consejo de Ministros de Agricultura de la UE que se celebrará días después, el 24 de mayo”, propone la presidenta de Intercitrus, Inmaculada Sanfeliu. “El ministerio ha trabajado técnica y políticamente muy bien esta medida y es muy consciente del riesgo fitosanitario existente, por lo que tal propuesta sería coherente con todo ese esfuerzo realizado”.
Actualmente, la situación generada en la citricultura por la entrada de plagas foráneas es, a juicio de Intercitrus, “insostenible”. Desde principios de siglo se han detectado en España hasta diecisiete patógenos de cítricos no presentes en Europa. Insectos y bacterias que han provocado que el presupuesto público del Gobierno valenciano para combatir estas plagas se haya tenido que triplicar en sólo tres años: de 6,2 millones de euros en 2018 a 18,4 millones en 2021. “Ese incremento de los costes se multiplica varias veces en el caso de los citricultores y los operadores, pues no en vano los pocos tratamientos permitidos y sistemas de lucha biológica disponibles son especialmente caros y poco eficientes, lo que dispararía la factura del productor por tal motivo, pero también por pérdidas masivas de producción no comercializable e incremento de destríos”, valora Intercitrus.
“La Xylella está obligando a realizar miles de pruebas, a arrancar miles de plantas en Alicante o Mallorca, a financiar un costoso plan de erradicación y sigue amenazando las plantaciones citrícolas próximas; el cotonet de Sudáfrica está descontrolado y ya se ha expandido a otras regiones como Murcia y Andalucía. Todos los expertos en esta materia saben que, cuando entra una nueva plaga, jamás se erradica en su totalidad”, señala Sanfeliu. “Dada la gravedad de la falsa polilla, no podemos permitirnos el lujo de volver a cometer los mismos errores del pasado”, añade.
La interprofesional viene advirtiendo en los últimos meses de que “Europa está a las puertas de sufrir una seria emergencia fitosanitaria”. Así lo describe un documento distribuido por la interprofesional entre eurodiputados y altos funcionarios de la Comisión, El caso de T. leucotreta es uno de los que más preocupan, pero hay más y están incluidos en la lista de plagas y enfermedades prioritarias en la UE: la mancha negra, enfermedad que en 2019 fue detectada en Túnez, los dos vectores del HLB (Trioza erytreae y Diaphorina citri), que ya se encuentran en el Mediterráneo, y la mosca oriental de la fruta (Bactrocera dorsalis), que ha sido detectada varias veces en Europa, la última de ellas el pasado verano en una plantación citrícola del litoral sureste de Francia.