INTIA ha analizado el efecto beneficioso que puede tener la alfalfa como cultivo trampa en la estrategia de control de chinches en una parcela de berenjenas. Actualmente, las herramientas disponibles para el control de estas especies son limitadas.
La finca experimental de Cadreita ha acogido este novedoso ensayo de métodos alternativos para el control de Lygus spp. y Nezara viridula, plagas que afectan a este cultivo al atacar los botones florales recién formados y, de esta manera, destruir su estructura floral y provocar su caída, con la consiguiente pérdida de productividad.
El equipo de experimentación de INTIA ha planteado este ensayo cuyos objetivos son, por un lado, comprobar el efecto de las chinches en la reducción de rendimiento de cultivo, y por otro, testar diferentes estrategias de control fitosanitario a la vez que se evalúa el interés que puede tener la alfalfa como cultivo trampa en la cercanía del cultivo.
Los tratamientos que se evalúan en este ensayo son tres: un testigo absoluto, un tratamiento con acetamiprid y piretroide que se trata de acuerdo al estado fenológico, aproximadamente en el segundo ramillete flora, y un último tratamiento con dos aplicaciones de Sivanto más el tratamiento anterior (acetamiprid + piretroide), en el momento de aparición de los primeros individuos. A lo largo del verano, se han venido realizando controles semanales aproximadamente desde finales de junio hasta agosto. Se muestreaban un total de diez plantas por variante y repetición y también se anotaba tanto el número de chinches como la fauna auxiliar existente. Debido al bajo nivel de plaga este año, la evaluación de la eficacia de los tratamientos no ha sido suficiente, por lo que se ha recomendado repetir esta experiencia la campaña que viene para analizar la efectividad de las distintas estrategias analizadas.
