El Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA) ha participado en un proyecto europeo de innovación enfocado a fomentar en las explotaciones agrícolas regionales el uso de setos y estructuras vegetales formados por especies autóctonas o tradicionalmente cultivadas en los bordes de los cultivos para minimizar el impacto medioambiental, reducir las necesidades de mantenimiento y facilitar la interacción con la fauna local.
El objetivo de los trabajos desarrollados por el equipo de Control Biológico y Servicios Ecosistémicos del IMIDA es que los agricultores dispongan de los máximos recursos posibles para diseñar las estructuras vegetales adecuadas según el tipo de cultivo, la ubicación de la parcela o los objetivos que se pretendan conseguir con su implantación, como la recuperación y el establecimiento de poblaciones de fauna útil para la agricultura (depredadores, parasitoides y polinizadores), el mantenimiento de la biodiversidad o la fijación de CO2 atmosférico.
El correcto diseño de estas barreras vegetales resulta especialmente importante en las parcelas afectadas por la Ley 3/2020, de 27 de julio, de recuperación y protección del Mar Menor, en la que, entre otras medidas, se impone la obligación de instalar estructuras vegetales para el control de la erosión y las escorrentías o la captación de nitratos procedentes de los riegos.
De esta forma, los trabajos realizados han permitido establecer una clasificación de las 55 especies de flora autóctonas más relevantes a la hora de albergar los distintos tipos de polinizadores y enemigos naturales, incluyendo además un calendario de floración a tener en cuenta para proporcionar cobijo y alimento a los insectos en épocas desfavorables (como invierno o verano), y especialmente en los momentos en los que el cultivo no ofrece estos recursos. Asimismo, se ha establecido una clasificación de estas plantas según su potencial para otras funciones, como el control de escorrentías, la captación de CO2 y nitratos o el aporte de materia orgánica al suelo.
Los trabajos han supuesto la plantación de más de 15.000 metros lineales de setos en diferentes paisajes agrarios representativos de la agricultura del sureste semiárido ibérico, formados por más de 28.000 plantas de sesenta especies. Además de la plantación de estos setos (distribuidos por Águilas, Mazarrón y Jumilla), el proyecto ha dado soporte técnico en el diseño y plantación de otros en distintas fincas del Campo de Cartagena.
Edición de un manual
A partir de esta experiencia se ha editado el manual Manejo de setos y otras estructuras vegetales lineales para una agricultura sostenible, que puede descargarse gratuitamente.
Este manual consta de 84 páginas repartidas en cinco capítulos e incluye desde información científica de base para mostrar la importancia de los setos en el funcionamiento de los agroecosistemas hasta técnicas para su implantación y mantenimiento.
Este proyecto, iniciado en 2018, ha sido promovido por la Asociación Paisaje y Agricultura Sostenible e impulsado por el Grupo Operativo ‘Setos multifuncionales para la agricultura y biodiversidad en la Región de Murcia’, en el que han participado, además del IMIDA, la Comunidad de Regantes Arco Sur, el Servicio de Sanidad Vegetal de la Comunidad Autónoma, el CEBAS-CESIC y varias empresas del sector agroalimentario.