Un estudio de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) advierte de que el comercio de rosa cortada constituye otra vía para la introducción de la falsa polilla, Thaumatotibia leucotreta, una de las plagas más peligrosas para la agricultura europea, responsable de que se impusiera un tratamiento de frío a las naranjas importadas de determinados países. El litoral que se extiende desde el noroeste de la península ibérica a través del Mediterráneo es la zona idónea para su establecimiento.
La evaluación de la Comisión Técnica de Sanidad Vegetal de la EFSA se limita a las etapas de entrada y establecimiento. Para ello, se utilizó un modelo que estima el número de individuos de T. leucotreta que sobrevivirían y surgirían como adultos de desechos comerciales o domésticos en una región de la UE climáticamente adecuada en una estación específica.
Debido a la polifagia extrema de T. leucotreta (afecta a más de un centenar de géneros de plantas huésped de más de cincuenta familias botánicas), el trabajo considera que la disponibilidad del huésped no sería un factor limitante para su establecimiento. La evaluación de la idoneidad climática, utilizando un enfoque de modelización demográfica de base fisiológica, identificó el litoral que se extiende desde el noroeste peninsular a través del Mediterráneo como zona adecuada para el establecimiento de la plaga. Según el estudio, el riesgo es mayor durante los meses de verano.
El estudio admite algunas incertidumbres sobre el posible establecimiento de la plaga debido a la falta de estudios demográficos a diferentes temperaturas y de estudios de población en el medio cultivado y natural en las zonas de distribución de la plaga. Por ello, los autores recomiendan ampliar los datos y la investigación respecto a la ecología y biología de T. leucotreta en su entorno natural y en la producción de rosas cortadas en África oriental; el nivel de infestación y agrupación de la plaga en los envíos de rosas cortadas; el nivel de eficacia de las inspecciones fronterizas de exportación e importación para detectar las diferentes fases de T. leucotreta en las rosas cortadas; y los procesos reales de gestión de residuos en la UE, incluida la proporción de compostaje privado y el tiempo transcurrido entre la eliminación inicial de residuos y su tratamiento.
La falsa polilla, una de las veinte plagas consideradas prioritarias en la UE por su impacto económico, medioambiental y social, está presente en el África subsahariana y ya ha alcanzado Israel. Se intercepta en rosas cortadas y otros productos frescos importados a la UE desde sus zonas de presencia. Sobre todo, cítricos, lo que motivó que la UE exija desde 2022 un tratamiento de frío a las naranjas importadas de países con presencia de la falsa polilla. Una medida reclamada por la citricultura mediterránea, que pide su ampliación a pomelos y mandarinas.