Las cifras de interceptaciones de cítricos importados en la Unión Europea con plagas o enfermedades siguen al alza: en junio se detectaron un total de 27, con varios casos de la mancha negra y la falsa polilla (Thaumatotibia leucotreta), detectada en Zimbabue. Para prevenir la entrada de este lepidóptero, La Unió Llauradora insiste en ampliar el actual tratamiento de frío a mandarina y pomelo, además de a las naranjas.
De un análisis de las interceptaciones, la organización agraria valenciana resalta su preocupación por la mancha negra, con interceptaciones en los primeros envíos de la nueva campaña de importación procedente del hemisferio sur como Argentina y Sudáfrica, en limones. “Después de una campaña catastrófica para nuestros productores de limones, en gran parte por el aumento de las importaciones, observamos estupefactos como ahora países como Sudáfrica y Argentina continúan sin ofrecer las garantías sanitarias para realizar envíos de cítricos de zonas libres de esas enfermedades. No entiendo a lo que esperan las autoridades comunitarias para tomar de nuevo medidas”, denuncia Carles Peris, secretario general de La Unió.
La última plaga detectada en los cítricos valencianos procede del continente africano: Scirtothrips aurantii, identificada, tras los avisos de esta organización agraria para efectuar las prospecciones, en frutos de granado, caqui, cítricos y uva de mesa en cuatro comarcas de Valencia y Alicante. “La introducción de una nueva plaga en nuestro territorio cuesta miles de euros al sector y a las Administraciones para su control y ya estamos combatiendo muchas plagas, con cada vez menos medios, a las que ahora sumamos este nuevo trips”, lamenta Peris, para quien las autoridades de la UE deben incrementar la presión inspectora en todos aquellos países que no son capaces de garantizar la seguridad fitosanitaria de sus envíos, como Turquía, Egipto, Sudáfrica o Zimbabue, además de algunos países de Sudamérica como Argentina o Brasil, fundamentalmente.
La Unió señala que, paralelamente al problema de las especies invasoras, urge solucionar el problema de competencia desleal por la falta de reciprocidad en materia fitosanitaria. “Hay que prohibir la entrada de todos aquellos productos importados que no cumplan con los compromisos del pacto verde europeo en su estrategia fitosanitaria. Hay que competir en igualdad de condiciones y no como hasta ahora. No podemos fomentar las importaciones mientras nuestros cítricos a veces se pudren en los árboles”, reclama su secretario general.