El tratamiento de frío (cold treatment) a las importaciones de naranjas, método para evitar la entrada de la falsa polilla que el Comité Permanente Fitosanitario de la Unión Europea debe aprobar en su próxima sesión, se basa en un estudio del Citrus Research Internacional (CRI), centro de investigación financiado por la Citrus Growers Association (Asociación de Productores de Cítricos de Sudáfrica), cuyos resultados han sido cuestionados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
El estudio, liderado por Sean Moore, investigador del CRI, avala que un tratamiento de frío “de intensidad reducida” durante 16 días a una temperatura de entre 0-1°C es suficiente para garantizar la mortalidad de las larvas de Thaumatotibia leucotreta. Sin embargo, los ensayos se realizaron alimentando a las larvas con dieta artificial, no de naranjas. De hecho, el mismo estudio compara la mortalidad de los estadios cuarto y quinto de T. leucotreta en naranjas infestadas de forma natural y con dieta artificial. Con un tratamiento de frío durante 16 días, el porcentaje de las segundas alcanza el 99,69%, mientras que las alimentadas con naranjas es del 92,3%.
Precisamente, el informe de la EFSA sobre los controles que lleva a cabo Sudáfrica para el control de T. leucotreta señala que “las conclusiones sobre los datos de mortalidad del ensayo experimental, basado en dieta artificial, no puede estar directamente relacionado con las frutas porque la tasa de mortalidad reportada es menor en frutos”, y recomienda que se deberían aportar “datos más fiables para sostener las tasas de mortalidad de diferente duración y temperatura utilizando alimentación de larvas en cítricos infestados; o proporcionar evidencia adicional para demostrar que la tasa de mortalidad en la dieta artificial se puede utilizar para estimar la tasa de mortalidad en frutos de cítricos”.
En un documento de la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (IPPC) sobre el tratamiento de frío contra la falsa polilla, Estados Unidos refleja su preocupación por el método propuesto por Moore y justifica su imposición de un cold treatment más conservador, de 22 días continuos a -0,55 °C, con 8 horas de tratamiento añadidas por cada día o parte de un día en el que la temperatura sea superior a (-0,27 °C).
China también alega que el ensayo muestra que la tolerancia al frío de las larvas en la fruta es “obviamente” más fuerte en la fruta que en la dieta artificial. “Las larvas en dieta artificial no se pueden utilizar en los ensayos de eficacia a gran escala. La diferencia de tolerancia al frío debe reevaluarse entre las larvas en frutos y las larvas en la dieta”, concluye.
Además de este tratamiento de frío “de intensidad reducida”, al sector citrícola español le preocupa que el acuerdo solo incluya a las naranjas, a pesar de que también se han producido interceptaciones de la falsa polilla en cargamentos de mandarinas y pomelos procedentes de Sudáfrica.