La inesperada, por repentina y extendida, aparición de Scirtothrips aurantii en cuatro comarcas de Alicante y Valencia obliga a revisar el programa de Gestión Integrada de Plagas de Cítricos, cultivo que lleva años sufriendo la continua introducción de nuevas especies invasoras.
La Guía publicada por el ministerio fue actualizada en 2022, con la inclusión de nuevas plagas, que en los últimos años han ido apareciendo, como las nuevas cochinillas Delottococcus aberiae y Pulvinaria polygonata, los ácaros tetraníquidos Eutetranychus banksi y Eutetranychus orientalis, y las especies de trips Chaetanaphothrips orchidii y Scirtothrips dorsalis. Estas nuevas detecciones, junto con el cambio en las dinámicas poblacionales, tanto de los diversos fitófagos que atacan a los cítricos como la de sus enemigos naturales, obligan a actualizar el programa de gestión de plagas.
Alberto Urbaneja, entomólogo del Centro de Protección Vegetal y Biotecnología del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias, explica que, al aumento de la diversidad de plagas presentes en las zonas citrícolas, se suman los cambios en los ciclos biológicos y en su incidencia, así como en el de sus enemigos naturales: el número de generaciones por año de muchas especies ha variado en los últimos tiempos debido a las condiciones climáticas. Así las cosas, el centro de investigación valenciano ya está recabando datos sobre la dinámica estacional y la estructura poblacional de las principales plagas, y de sus depredadores y parasitoides.