Dhop, la solución digital, se erige como un aliado esencial en la agricultura moderna, empoderando a los asesores técnicos y garantizando la sostenibilidad y la inteligencia en la agricultura. En un entorno agrícola en constante cambio, Dhop aborda los retos fundamentales que enfrentan los asesores técnicos. La gestión de riesgos agronómicos, las restricciones legales y las complejidades fiscales son desafíos cruciales. La llegada del SIEX representa un hito en la agricultura moderna, exigiendo a los asesores interpretar y aplicar datos complejos y desde una multitud de fuentes. Dhop centraliza en un único lugar todos los datos de manera eficiente y en tiempo real, y los interpreta adecuadamente para sacarles el máximo provecho. La solución se enfoca en cuatro áreas clave: su CRM avanzado centraliza datos de explotaciones, técnicos, agricultores, permitiendo campañas específicas y fidelización. El Recomendador Agronómico, integrado con el Ministerio de Agricultura y otras plataformas, transforma las visitas técnicas tradicionales en un proceso digital, ahorrando tiempo, evitando errores y mejorando la precisión de los datos. La automatización de procesos simplifica la generación de documentos y el seguimiento de parcelas. Los cuadros de mando proporcionan información esencial para la toma de decisiones estratégicas, y la tecnología Salesforce impulsa las relaciones con los agricultores. Dhop se convierte en un aliado esencial para los asesores técnicos, permitiéndoles enfrentar los desafíos de la agricultura moderna con confianza y brindar un servicio de alta calidad, promoviendo una agricultura más inteligente, eficiente y sostenible.
Uno de los principales desafíos a los que se enfrentan los asesores técnicos es la gestión de riesgos agronómicos. En un mundo donde los patrones climáticos están manifestándose de manera impredecible, muchas veces, los asesores deben encontrar formas innovadoras de ayudar a los agricultores a proteger sus cultivos de eventos climáticos extremos, plagas y enfermedades. La capacidad de anticipar estos riesgos se ha vuelto fundamental para mantener la rentabilidad en la agricultura.
Por si esto fuera poco, las restricciones legales que afectan a la agricultura son cada vez más numerosas y complejas. Desde regulaciones sobre el uso de plaguicidas hasta directrices ambientales, los asesores deben mantenerse actualizados para poder asistir a los agricultores sobre cómo cumplir con todas estas normativas. La falta de cumplimiento puede tener graves consecuencias tanto económicas como legales.
Y la agricultura no está exenta de las complejidades fiscales. Otro de los retos a los que se enfrentan los asesores es ayudar a los agricultores a navegar por un laberinto de normas fiscales, deducciones y beneficios fiscales. Una gestión fiscal adecuada puede marcar la diferencia entre la viabilidad y la quiebra para una explotación agrícola.
