Finalmente, una sesión extraordinaria del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos aprobó la aplicación del tratamiento de frío a las naranjas importadas de países con presencia de la falsa polilla Thaumatotibia leucotreta, una medida muy reclamada por la citricultura mediterránea.
El cold treatment se aplicará solo a naranjas pese a que las clementinas, mandarinas y pomelos son también hospedadores de T. leucotreta. Se acordó tras una película de suspense que se prolongó durante cinco días. Primero, la Comisión Europea desestimó la aplicación inmediata del tratamiento de frío, tras retirar la propuesta en la sesión del Comité Permanente de Plantas, Animales, Alimentos y Piensos (SCoPAFF) celebrada el 20 de mayo, lo que se interpretó como una cesión a las presiones del lobby sudafricano, apoyado por Países Bajos.
La siguiente semana, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, trasladó al Consejo de Ministros de la Unión Europea y a la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria, Stella Kyriakides, su malestar porque no se hubiera ni tratado esta medida. “No es bueno que esto se retrase”, advirtió. Las gestiones surtieron efecto y la mañana del 25 de mayo se celebró una sesión extraordinaria del SCoPAFF para aprobar el tratamiento más eficaz contra una plaga prioritaria y polífaga que puede afectar a muchos otros cultivos, como caqui, albaricoque, tomate, pimiento, berenjena, uva, plátano, maíz o melocotón. “Planas ha dado el último y necesario empujón para que la propuesta saliera adelante. Lo aprobado hoy por el SCoPAFF es algo que trasciende a la citricultura española, es un paso histórico en favor de la sanidad vegetal del conjunto del agro europeo”, reconoció Inmaculada Sanfeliu, presidenta de la interprofesional citrícola española, Intercitrus.