La Red IBER-XYFAS organizó en la Casa de la Ciencia de Valencia una jornada para presentar los últimos avances en la detección de Xylella fastidiosa, que reunió a investigadores europeos e iberoamericanos y sirvió para compartir experiencias y debatir sobre las medidas tomadas para evitar su propagación.
En la jornada, primera actividad pública de este consorcio creado a principios de año y promovido por el Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo (CYTED), participaron Edson Bertolini, de la Universidade Federal do Rio Grande do Sul UFRGS (Brasil); Juan Pedro Bouvet, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Argentina); Carlos Alonso Chacón Díaz, del Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales de la Universidad de Costa Rica; Maria Saponari, del Consiglio Nazionale delle Ricerche de Italia; Diego Olmo, del Laboratorio Oficial de Sanidad Vegetal de las Islas Baleares; y Sergio Cubero, del IVIA. “Lo que estamos intentando entre todos, con la ayuda de nuestros colegas americanos, que llevan más tiempo de rodaje, es reconstruir qué es lo que ha pasado y cómo nos ha sorprendido en Europa”, resumió Ester Marco, bacterióloga del IVIA y responsable del Laboratorio de Referencia de fitopatógenos español sobre Xylella, durante la presentación de la jornada.
Cada científico expuso el caso particular de su país o región. Con la experiencia excepcional de Baleares, que en tres años contabiliza casi un millar de plantas infectadas en más de veinte especies diferentes y por muchas cepas distintas, Diego Olmo habló del reconocimiento de síntomas en los principales cultivos y con qué otros se pueden confundir. Por ejemplo, los síntomas en almendro se asemejan a los de verticilosis; en vid, se pueden confundir con síntomas de enfermedades de la madera, el mosquito verde y la sequía; en olivo, se han encontrado casos de positivos asintomáticos y negativos con síntomas, debido generalmente a la carencia de boro.