La aparición de Scirtothrips aurantii en la Comunidad Valenciana constituye un problema para muchos cultivos, como el granado, donde ya afecta a más del 60% de la producción de Alicante.

El presidente de la Denominación de Origen Protegida de la Granada Mollar de Elche, Francisco Oliva, ha alertado de la “difícil situación que está viviendo el sector como consecuencia de los problemas derivados de las altas temperaturas” y la aparición de este trips “que está afectando al 60% de la producción de granadas”. En un primer análisis de la situación, el Consejo Regulador estima que de las 40.000 toneladas de granadas que en los últimos años se vienen cosechando en los cuarenta municipios amparados por la DOP (comarcas de L’Alacantí, Baix Vinalopó y Vega Baja), más de 24.000 toneladas se van a ver perjudicadas por esta situación, lo que supone unas pérdidas económicas de entre 12 y 15 millones de euros.

Las temperaturas cálidas de este invierno han favorecido el desarrollo y dispersión de esta plaga polífaga ya establecida en Huelva y Sevilla. En granado, los principales daños se han producido durante la floración y el cuajado del fruto. Ese deterioro se observa en el fruto, en forma de cicatrices alrededor de la corteza. A ello hay que sumar las elevadas temperaturas de los últimos años, que producen daños por sol en la corteza, conocidos como albardado. Por estos motivos, mucha granada se está tirando al suelo para favorecer que las que se quedan en el mismo tengan más calibre y calidad.

Oliva apunta que el verdadero daño se observará cuando empiece la campaña de recolección y afloren todos esos problemas, tanto en el campo como en el almacén. De hecho, se desconoce cuánta granada de Elche se va a poder certificar con el sello de calidad de la Denominación de Origen porque el Consejo Regulador tiene unos estándares de calidad muy elevados (solo se certifica la granada de primera y extra y si los daños superan el 25% no se puede etiquetar con DOP), y todavía es pronto para saber cuánta se podrá vender con este sello. En cualquier caso, añade el presidente de la DOP, las granadas que lleguen al mercado, con sello o sin él, estarán en buenas condiciones para su consumo.

Más de 24.000 toneladas se van a ver perjudicadas, lo que supone unas pérdidas económicas de entre 12 y 15 millones de euros

Para Oliva, esta situación es desastrosa y más para un sector que acumula malas campañas por la sequía, los efectos del cambio climático, el descenso del consumo por la inflación, los precios bajos en el campo, el aumento de la competencia internacional y la presencia de nuevas variedades. “Llevamos acumulando demasiados inconvenientes y esta plaga es lo que nos faltaba, por eso la próxima semana nos vamos a reunir con el Conseller de Agricultura, Miguel Barrachina, para que conozca de primera mano nuestra situación y los daños que vamos a sufrir tanto agricultores como comercializadores con el fin de buscar apoyos y encontrar soluciones”.

La granada mollar de Elche es la única granada del mundo con Denominación de Origen Protegida. La zona geográfica de la DOP ampara a 40 municipios de L’Alacantí, Baix Vinalopó y Vega Baja. Estas comarcas concentran más del 75% de la producción nacional de granadas, son los principales productores europeos y los primeros a nivel mundial en lo que se refiere a la variedad mollar.

La campaña de la granada mollar de Elche genera en el sector más de tres mil empleos directos y un millar de puestos de trabajo indirectos. En el Consejo Regulador hay inscritos alrededor de quinientos agricultores de las zonas amparadas por la DOP y en estas comarcas se estima que hay una superficie dedicada a las granadas de 3.000 hectáreas, de las que un tercio forma parte de la DOP.