El Servicio de Sanidad Vegetal de la Región de Murcia ha anunciado la primera detección de la cochinilla estriada de las Seychelles (Icerya seychellarum), también llamada cochinilla algodonosa amarilla, en una plantación de caqui de San Javier. Esta plaga podría suponer un problema para los cultivos cítricos de la zona.
Aunque esta especie, emparentada con la cochinilla acanalada de los cítricos (Icerya purchasi), está presente desde hace varios años en algunas plantas ornamentales en zonas verdes de la ciudad de Murcia (morera, algarrobo, palmito, por ejemplo), todavía no había sido detectada en plantaciones comerciales. Sanidad Vegetal sospecha que la plaga se introdujo con el propio material vegetal, ya que se encuentra muy distribuida en una plantación joven de caqui, en gran parte del arbolado, con presencia dispersa en casi todas las ramas.
Los principales daños que produce I. seychellarum son directos, por las picadas que pueden llegar a debilitar, necrosar y secar brotes y ramas, en caso de estar muy concentrados. Indirectamente, la proliferación de negrilla como consecuencia del melazo excretado, tanto en hojas como en frutos, también puede afectar al manejo y manipulado, tal como sucede con otras especies. Según la bibliografía, en caso de ataques intensos, la plaga puede afectar a frutos de algunas especies vegetales.
Aunque está presente en algunas especies ornamentales de la ciudad de Murcia, todavía no había sido detectada en plantaciones comerciales
Además de este cultivo, la cochinilla tiene otras muchas especies sobre las que puede alimentarse, como el mango, primer cultivo donde se detectó oficialmente en España, en 2015, así como aguacate o nisperero. En la Región de Murcia, inquieta su incidencia en los cítricos, cultivo muy extendido en la zona afectada. El naranjo amargo es un hospedante principal, lo que hace temer que el resto de especies puedan ser sensibles a este insecto. I. seychellarum es muy polífaga: puede afectar a un amplio número de plantas ornamentales, como laurel, almez, Ficus sp., Quercus sp., durillo, stretlizia, etc. Por último, existen estudios que respaldan su posible impacto en especies hortícolas.
Esta plaga es partenogenética, por lo que la presencia de machos es muy escasa. Las hembras adultas presentan un cuerpo alargado-rojizo, con patas y antenas de color negro cubiertas por una densa capa de cera blanca, con prolongaciones marginales y dorsales a modo de penachos de color amarillento y con presencia de abundantes filamentos sedosos finos distribuidos por todo el cuerpo. El ovisaco se sitúa debajo y alrededor de la hembra. Los individuos inmaduros son de color amarillento, que se va tornando en anaranjado. Presenta un número de 2-5 generaciones, según la zona y climatología.
Se encuentra ampliamente distribuida por Asia, mientras que en Europa, se localiza en los países del Mediterráneo: Italia, Francia, Portugal y España, donde se ha confirmado su presencia en Andalucía, Islas Canarias o la Comunidad Valenciana. Aunque en Europa no se considera una plaga de cuarentena, en algunos países americanos sí que está categorizada como tal.