La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y La Unió de Llauradors han solicitado una reunión urgente con la consellera de Agricultura de la Comunidad Valenciana, Mireia Mollà, para analizar la situación actual y la estrategia llevada a cabo para frenar la plaga del cotonet de Sudáfrica Delottococcus aberiae.
Ambas organizaciones consideran que las acciones para controlar la plaga “no han funcionado como sería deseable y los daños van a ser mayores que en la campaña pasada”, mientras que cada vez hay más zonas afectadas. “Los productores de cítricos de la Comunidad Valenciana están desesperados y se muestran realmente impotentes ante la invasión de cotonet en sus campos, ya no saben lo que hacer y los costes de producción siguen aumentando a pasos agigantados”, señalan en un comunicado.
La Unió y AVA-ASAJA aseguran que el Plan de Acción del Ministerio de Agricultura no ha evitado la expansión de D. aberiae, que las sueltas del parasitoide Anagyrus aberiae no han resultado suficientemente eficaces, que no existe una estrategia coordinada para liberar el depredador Cryptolemus montrouzieri en los momentos donde tendría más eficacia y que, finalmente, pese al esfuerzo de la ayuda para el reparto de trampas con feromonas, ésta llegó tarde y su producción ha sido insuficiente.
El secretario general de La Unió, Carles Peris, y el presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, indican que “está muy bien conocer la situación de la plaga, las investigaciones y pruebas realizadas, pero necesitamos saber ya qué medidas concretas de actuación se van a realizar durante los próximos años para lograr el objetivo final de controlar el cotonet de Sudáfrica”.
Los dirigentes de las dos principales organizaciones agrarias de la Comunidad Valenciana no confían en la eficacia de las medidas adoptadas contra esta plaga de los cítricos. “Sabemos en estos momentos que la estrategia de control no ha servido ni para controlar ni para reducir la plaga, y desconocemos la estrategia que se quiere adoptar para la próxima campaña y algo habrá que cambiar pues no funciona”, advierten. Ante esta situación, creen que la consellera Mireia Mollà “debe reunirse de forma urgente para ver las opciones a seguir pues está en juego el futuro de numerosos citricultores de la Comunidad Valenciana”.