Investigadores de laUniversidad de Córdoba y el IFAPA han desarrollado una línea de garbanzo que alcanza rendimientos más estables que las variedades locales españolas. La principal característica de esta línea es una doble vaina que porta las semillas, el futuro alimento. De manera general, la planta sólo dispone de una vaina en cada nudo. Una variedad india presenta sin embargo una mutación que duplica el número de vainas por nudo. Los investigadores han cruzado de forma clásica la variedad india con las españolas, para conocer si esa particularidad era positiva para los garbanzos locales, y han descrito sus características genéticas del nuevo tipo.
En los mercados de
Entre los garbanzosdesise encuentra una variedad con una doble vaina que llamó la atención a los investigadores del Departamento de Genética de
La experimentación
En trabajos previos se transfirió el carácter de doble vaina de la variedad india especial a algunas variedades propias de España, como el garbanzo blanco lechoso o el pedrosillano. Para ello, se eligió el cruzamiento convencional, por el que los agricultores han mejorado sus cultivos a lo largo de los siglos. "En este caso, no es posible transferir el carácter por transgénesis por dos motivos: aún no está determinado el gen responsable de la mutación y, en todo caso, es más costoso", especifica Gil Ligero.
Los resultados de las líneas de doble vaina y de vaina simple se habían ensayado en campos de cultivo experimentales ubicados en diferentes climas y suelos, en los municipios de Córdoba, Mengíbar (Jaén), Carmona (Sevilla) y Jerez (Cádiz), durante varias campañas agrícolas. Además de la producción, se evaluaron otros aspectos de la planta, como el porte o el momento de la floración. "En conjunto, la línea de doble vaina que habíamos desarrollado presentaba rendimientos más estables, sin tantas variaciones entre campañas, como las variedades convencionales", explica Millán. Esta estabilidad en el cultivo puede ser interesante para los agricultores.
Todo está en los genes
Determinar estas características genéticas puede propiciar que los cultivos sean más productivos o que los frutos obtenidos tengan mejor aceptación en el mercado. También puede permitir que la especie se adapte mejor a los efectos del cambio global, haciéndola más resistente al calor o a las sequías. "En el fondo, todo está escrito en los genes", resume Millán.
A partir de un trabajo en el que también participaban las universidades Estatal de Washington (Estados Unidos) y de Saskatchewan (Canadá), se estudió dónde se localizan los genes que controlan la doble vaina en la variedad india. Los resultados han sido publicados en la revista científicaTheoretical and Applied Genetics.
El carácter de la doble vaina es, además, transferible a otras leguminosas. Muchos de los mecanismos genéticos entre especies de legumbres son compartidos, y el que controla el número de semillas en el tallo podría ser también común en ellas. Según afirman los investigadores de
L. Ali, A. Deokar, C. Caballo, B. Tar?an, J. Gil, W. Chen, T. Millan, J. Rubio. ?Fine mapping for double podding gene in chickpea?.Theor Appl Genet(2016) 129:77?86 DOI 10.1007/s00122-015-2610-1
FUENTE: Universidad de Córdoba