El pasado verano, se descubrió por primera vez en Europa, y de forma fortuita e independiente, el escarabajo de cuernos largos Olenecamptus bilobus, originario del sudeste asiático, en dos localizaciones: Elche (Alicante) y la isla griega de Lemnos. Este insecto perforador de madera es una plaga de los géneros Arthrocarpus, Ficus y Morus.
Esta especie está ampliamente distribuida en Australasia, el Paleártico Oriental, la Región Oriental y Madagascar, pero no había aparecido todavía en el continente europeo. O. bilobus tiene un interés fitosanitario de moderado a normal en sus países de origen, tanto en su estado larvario como adulto. Las larvas perforan la albura en sus primeros estadios y posteriormente penetran en la madera dura; los adultos, que tienen menos impacto en los árboles, roen la corteza verde de los brotes y mastican hojas grandes.
Los dos ejemplares capturados en la pedanía de Salades (Elche) fueron recolectados de noche en el mismo lugar, en dos ocasiones diferentes, de pie sobre una pared blanca y probablemente atraídos por la luz de una farola. Ambos se conservan en la colección privada de Carlos R. de Queros, en Florencia. El ejemplar encontrado posteriormente en la isla Lemnos, por otro lado, fue registrado en la plataforma INaturalist.
Según explican los autores de este trabajo, publicado en Biodiversity Data Journal, O. bilobus consta de múltiples subespecies, separadas principalmente según los patrones cromáticos de los élitros. Los tres especímenes parecen, en sus características generales, pertenecer al mismo taxón, pero la extrema variabilidad cromática de la especie complica la atribución de estos ejemplares a una de las subespecies conocidas.
Los autores sugieren que la introducción accidental de O. bilobus en la isla de Lemnos (Grecia) podría deberse al tráfico naval. Sin embargo, la cercanía al aeropuerto local, a 5,5 km, no excluye el transporte aéreo. Del mismo modo, los ejemplares recogidos en Salades estaban la poca distancia del aeropuerto y el Puerto de Alicante (7,5 y 13 km, respectivamente), zona donde en seguimientos anteriores se encontraron otros escarabajos no autóctonos. En ambos casos, los especímenes fueron detectados en áreas que albergan viveros de plantas, lo que apunta también a la importación de plantas con fines ornamentales como posible causa de la introducción. En cualquier caso, se desconoce si estos escarabajos representan introducciones esporádicas o poblaciones locales establecidas en sus primeras fases.
Según este trabajo, no está claro si la especie prefiere plantas vivas o muertas para la oviposición. Aunque los datos científicos publicados parecen sugerir que es capaz de desarrollarse en ambos, un cierto grado de humedad de la madera muerta resulta fundamental para asegurar su supervivencia. El escarabajo es polífago, pero parece preferir plantas de los géneros Arthrocarpus, Ficus y Morus. Actualmente no existe ninguna medida específica para su control, salvo la eliminación de adultos y la destrucción de las plantas afectadas.