La séptima edición del Máster PlantHealth (Plant Health in Sustainable Cropping Systems), coordinado por la Universitat Politècnica de València (UPV), confirma su vocación internacional, con la graduación de 22 alumnos procedentes de 18 países.

El Máster, coordinado y dirigido por el profesor Josep Armengol, ha sido diseñado por un consorcio que incluye otras cuatro universidades europeas especializadas en el campo de la Sanidad Vegetal: la Universidad de Göttingen, en Alemania; la Universidad de Padua, en Italia; y dos universidades francesas: L'Institut Agro y AgroParisTech. Se estructura en dos años y está integrado en el Programa Erasmus Mundus.

Esta edición, asistieron alumnos procedentes de cuatro continentes y dieciocho países: Argelia, Brasil, China, Ecuador, España, Filipinas, Francia, India, Indonesia, Italia, Líbano, México, Nepal, Nigeria, Pakistán, Perú, Sierra Leona y Vietnam.

La diversidad de la procedencia del alumnado se refleja en la variedad de temas objeto de las tesis presentadas: entre otros, hay estudios sobre la biología de un parasitoide de Drosophila suzukii, la enfermedad emergente de la antracnosis del guisante de invierno en Francia, el desarrollo y aplicación de dsRNA para el control de CGMMV en pepino y ToBRFV en tomate, la detección de infecciones latentes para la validación de un modelo predictivo de Venturia oleaginea en el olivo, la resistencia de la yuca contra el virus de la raya marrón de la yuca de Uganda, la eficacia de agentes bacterianos de biocontrol contra Sclerotinia sclerotiorum en colza oleaginosa, el control biológico de Pseudococcus longispinus en caqui o la tolerancia al estrés hídrico y a la salinidad en Leucaeana leucocephala, una especie con creciente potencial invasor en España.

En septiembre, la UPV acogió la graduación de la séptima promoción con la presencia como ponente invitado de Cyrille Verdun, Global Product Manager de Koppert, que impartió la conferencia Industry's vision for the global biocontrol market (Visión de la industria sobre el mercado mundial de biocontrol).

Verdun recordó el origen de esta empresa fundada por Jan Koppert, que hace medio siglo comenzó a comercializar el ácaro depredador Phytoseiulus persimilis para el control de la araña roja en el cultivo del pepino, hito que sentó las bases del control biológico.

El responsable de Koppert repasó la evolución del control biológico en los últimos años y mencionó algunos casos de éxitos, como el control de Diatraea saccharalis en 2 millones de hectáreas de caña de azúcar en Brasil con parasitoides que fueron distribuidos y liberados mediante drones.

Verdun también habló de los nematodos y hongos entomopatógenos, agentes de control biológico en los que la empresa holandesa está trabajando los últimos años, y de otras estrategias de control integrado, como el uso de cubiertas vegetales.

El ponente aprovechó la conferencia para lamentar la situación legislativa actual en la Unión Europea, que “en la práctica no está facilitando el registro de biológicos”: mientras que en Estados Unidos un nuevo producto se puede registrar en dos años, el proceso en la UE se prolonga hasta una media de siete años.