La política fitosanitaria europea monopolizó el 17º Symposium de Sanidad Vegetal, que del 13 al 15 de marzo reunió en Sevilla a cerca de un millar de asistentes. “El debate sobre la sanidad vegetal abre un nuevo periodo de diálogo en la UE”, afirmó el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas.
Durante la clausura, Planas recalcó que España comparte los objetivos ambientales marcados por la UE, pero considera que la necesaria transición ecológica se tiene que abordar junto al sector, con criterio y teniendo en cuenta sus particularidades. Para el ministro, la retirada del Reglamento de Uso Sostenible de Fitosanitarios supone “el punto de partida para un nuevo diálogo con una presencia más activa de todos los actores implicados”.
Valentín Almansa de Lara, director general de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal, expuso los tres errores que han precipitado la “muerte” de este reglamento, un texto legislativo que considera “mal planteado desde el principio”. El principal, “confundir objetivos con indicadores”, en alusión a los polémicos compromisos de reducción del 50% del uso de estos productos para 2030. En segundo lugar, el establecimiento de zonas sensibles libres de fitosanitarios, un error que fue rápidamente subsanado. Por último, la imposición de una carga administrativa “demencial e inasumible”. El responsable del ministerio lamentó que “no fue posible encontrar una zona común de entendimiento” entre los organismos europeos para sacar adelante un reglamento de consenso.