El Puerto de Almería ha interceptado por primera vez la falsa polilla (Thaumatotibia leucotreta) en un cargamento de granadas procedentes de Marruecos, un país considerado como zona libre de esta plaga prioritaria en la UE. La Interprofesional Española de la Naranja y la Mandarina, Intercitrus, que exige un replanteamiento de la relación comercial con este país, primer proveedor no comunitario de frutas y hortalizas de España y el quinto mayor de la UE.
Gracias al control fitosanitario en el Puerto de Almería, pudo ser identificado el patógeno en una fruta que procedía de un país que, como Marruecos, no tiene declarada tal plaga. “De haber ingresado y descargado la partida afectada en algún almacén de Almería se hubiera puesto en riesgo no sólo las producciones de mandarinas, naranjas o pomelos próximas, sino a todos los frutales que, además de la propia granada, también son hospedantes de esta enfermedad, como es el caso del aguacate, la vid, el melocotón, la nectarina o el mango; algunas hortalizas, como pimiento o berenjena; otros cultivos continentales como el algodón o el maíz e incluso de flor ornamental, como las rosas”, advierte Intercitrus, que exige a las autoridades europeas que envíe inspectores para confirmar el alcance de la posible presencia de T. leucotreta en el país magrebí. “Esta interceptación debe poner en alerta a todo el sector hortofrutícola español y europeo y en caso de ratificarse la sospecha, la Comisión debería replantarse su política contra esta plaga de cuarentena cuyo combate está regulado como prioritario al ser una de las veinte de mayor impacto económico, ambiental y social”, reclama la presidenta de Intercitrus, Inmaculada Sanfeliu.
Si la falsa polilla se declarase en Marruecos, “la UE se encontraría con que los tres primeros proveedores no europeos de clementinas y mandarinas padecen todos esta plaga, con lo que se tendría que ver obligada –como llevamos reclamando desde el principio- a imponer el tratamiento de frío también a las mandarinas procedentes de estos tres países (Marruecos, Sudáfrica e Israel), no solo a la naranja originaria de zonas afectadas por esta plaga, como actualmente”, insiste Sanfeliu.