En un reciente estudio llevado a cabo en mandarinos cultivados en suelos calcáreos de la población de Massafra, en la provincia de Tarento (Italia), se ha demostrado el impacto positivo del bioestimulante Pepton 85/16 en la producción de cítricos. En estas condiciones, la deficiencia de hierro puede dar lugar a problemas como la clorosis férrica. Los resultados obtenidos en el estudio son alentadores, ya que muestran un aumento significativo en el peso de los frutos, una mayor producción de zumo y un incremento en el contenido de pectato de calcio, un indicador importante de la calidad y resistencia de la fruta. Estos hallazgos respaldan el uso del bioestimulante de APC Agro como una solución efectiva para mejorar la producción y calidad de los cítricos en suelos calcáreos.
El hierro es un nutriente esencial para las plantas ya que es un componente clave de varias proteínas y enzimas, incluyendo la clorofila. El mecanismo de acción del hierro en la planta es complejo y está relacionado con su capacidad para actuar como un cofactor de varias reacciones enzimáticas. El hierro es necesario para la producción de clorofila y en la síntesis de proteínas y enzimas que intervienen en la respiración, síntesis de ADN y en la defensa contra el estrés abiótico.
La planta utiliza mecanismos de absorción de hierro, que incluyen la reducción del hierro férrico (Fe3+) a hierro ferroso (Fe2+) en la rizosfera, lo que aumenta la solubilidad del hierro en el suelo y su absorción por parte de las raíces. El hierro se absorbe por las raíces de la planta en forma de iones férricos y es transportado a través del xilema hasta las hojas y otros tejidos vegetales. Para su absorción, el hierro debe estar en forma soluble, lo que puede ser un desafío en algunos suelos, especialmente en aquellos suelos calcáreos con pH alcalino.