Un estudio realizado por el Comité de Acción contra Resistencias a Fungicidas (FRAC-España), la Asociación Empresarial para la Protección de las Plantas (AEPLA) y el Departamento de Microbiología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga ha confirmado las múltiples resistencias a fungicidas de Botrytis cinerea en cultivos hortícolas del sureste peninsular.
En este trabajo se analizaron 310 aislados de B. cinerea recolectados en 24 parcelas de siete cultivos hortícolas (pepino, pimiento, calabacín, tomate, berenjena, lechuga y fresa) de la Región de Murcia, Almería, Granada y Málaga. Aunque con diferentes frecuencias, se detectaron aislados del patógeno resistentes a los seis fungicidas analizados (piraclostrobin, boscalid, fluopyram, fenhexamida, pirimetanil y fludioxonil).
Las frecuencias de resistencia a pirablostrobin y boscalid fueron relativamente altas (93% y 66% respectivamente), mientras que fueron menores los porcentajes para fluopyram y fenhexamida (40% y 33%) y, sobre todo, para pirimetanil y fludioxonil (19% y 15%). “Aunque para algunas materias activas los niveles son altos, esto no quiere decir que esos compuestos no funcionen. Simplemente, que hay que estudiar cada finca o parcela a nivel individual, analizar la población del hongo en ella y ver qué perfil de resistencias tienen para poder darles recomendaciones sobre qué productos funcionan y cuáles no”, puntualiza Dolores Fernández Ortuño, profesora del Departamento de Microbiología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Málaga, que ha participado en este trabajo.
El patógeno que presenta un mayor riesgo de generar resistencias a fungicidas es, con diferencia, B. cinerea: a nivel global, ya se han descrito 65 casos en este hongo. En las tres provincias andaluzas y Murcia se observaron aislados resistentes a piraclostrobin, boscalid, fluopyram y pirimetanil; para fenhexamida, en todas menos Granada, mientras que las resistencias a fludioxonil solo se localizaron en parcelas de Almería y la región murciana. Cada una de las parcelas analizadas mostró un perfil de resistencia diferente para cada materia activa analizada.