Bayer Crop Science acaba de celebrar un ciclo de eventos virtuales, Future of Farming Dialogue, para reflexionar sobre el gran dilema de la agricultura: cómo lograr un sistema alimentario saludable, sostenible y respetuoso con el medioambiente, que sea capaz de alimentar a una población mundial cada vez más numerosa. Bruno Tremblay, director de Bayer Crop Science en Europa, Oriente Medió y África, defiende la transformación hacia una agricultura sostenible, pero reclama políticas que apoyen la innovación de las empresas y que decisiones sobre la renovación de sustancias activas, como el glifosato, se basen en criterios estrictamente científicos.
La multinacional, dentro de los compromisos de sostenibilidad adquiridos, se ha fijado el objetivo de reducir un 30% las emisiones de gases de efecto invernadero producidas por cultivos clave en los principales mercados agrícolas y reducir el impacto ambiental de la protección de cultivos en un 30% en 2030. Además, acaba de lanzar la Bayer Carbon Initiative, con la que recompensará a los productores por generar créditos de carbono mediante la adopción de prácticas climáticamente inteligentes.