El control de las moscas blancas Trialeurodes vaporariorum y Bemisia tabaci, y de la polilla Tuta absoluta, con míridos depredadores ha sido muy exitoso en el cultivo del tomate en la región mediterránea, tanto en invernaderos como en cultivos al aire libre (Arnó y col., 2018). Hasta ahora, las especies más utilizadas han sido Macrolophus pygmaeus, Nesidiocoris tenuis y Dicyphus bolivari. En Cataluña, la Gestión Integrada de Plagas (GIP) del tomate protegido recomienda la conservación de míridos depredadores o la inoculación de M. pygmaeus cuando las poblaciones naturales son escasas. En los casos en que se aplica la conservación, la especie que mayoritariamente coloniza los cultivos en el ciclo de primavera es M. pygmaeus, aunque en los últimos años se aprecia un incremento de N. tenuis. A pesar de que en diversas zonas productoras del Mediterráneo se ha preconizado las sueltas de N. tenuis en invernadero, esta práctica supone un riesgo importante en algunos ciclos de cultivo por los daños que puede llegar a producir a la planta.
Dicyphus errans y D. bolivari son míridos presentes en nuestra zona (Goula y Alomar, 1994), que pueden instalarse de forma temprana en los cultivos inoculándolos en la fase de semillero (Madeira y col., 2018). En el presente estudio, hemos investigado la utilización de estos depredadores en el cultivo de tomate de invernadero para el control de las principales plagas, la mosca blanca B. tabaci y la polilla T. absoluta.
Los individuos de D. bolivari y de D. errans utilizados en los ensayos procedían de crías mantenidas en el centro del IRTA en Cabrils (Barcelona) en plantas de tabaco y con huevos de Ephestia kuehniella como presa. La cría de D. bolivari se inició con individuos recolectados en el área de Barcelona, mientras que la cría de D. errans se inició con individuos procedentes del Rosellón francés y del Piamonte italiano. Los adultos de B. tabaci y de T. absoluta procedían de crías sobre col y sobre tomate, respectivamente.