El psílido asiático de los cítricos, Diaphorina citri Kuwayama (Hemiptera: Liviidae) es uno de los vectores más importantes de la bacteria causante del huanglongbing (HLB) o greening, una enfermedad de gran impacto en la mayoría de las áreas citrícolas del mundo. Hasta el momento, ni la enfermedad ni el psílido están presentes en la cuenca mediterránea, donde citrange Carrizo (Citrus sinensis Osb. x Poncirus trifoliata L. Raf.) es uno de los patrones de cítrico más utilizados. En este trabajo se evaluó la susceptibilidad de este patrón a D. citri, así como la de los patrones naranjo amargo (Citrus aurantium L.) (susceptible), y trifoliado (Poncirus trifoliata L. Raf.) (resistente). Para evaluar la susceptibilidad de citrange Carrizo a D. citri, se realizaron experimentos de puesta y supervivencia, y de elección. En condiciones de laboratorio, los patrones citrange Carrizo y naranjo amargo tuvieron un mayor índice de puesta que P. trifoliata, donde este fue nulo. Los experimentos de semi-campo confirmaron que citrange Carrizo es un patrón extremadamente favorable para el desarrollo y la reproducción de D. citri. La información obtenida en este trabajo muestra como el principal vector del HLB podría causar daños muy graves en la citricultura de la cuenca mediterránea.
Diaphorina citri Kuwayama (Hemiptera: Liviidae) (Figuras 1 y 2) es una plaga clave de los cítricos dado su papel como vector de la bacteria que causa el huanglongbing (HLB) o greening (Grafton-Cardwell y col., 2013). Además de D. citri, esta enfermedad también la transmite otro psílido, el psílido africano de los cítricos Trioza erytreae (Del Guercio) (Hemiptera: Triozidae) (Bové, 2006). La mayoría de las regiones donde se cultivan cítricos en todo el mundo ya han sido colonizadas por HLB o al menos uno de sus vectores. Si no se toman medidas, los árboles pueden morir entre cinco a diez años tras la infección (Bové, 2006). La enfermedad del HLB está causada por tres especies de bacteria Candidatus Liberibacter (Ca. L.): Ca. L. asiaticus (Las), Ca. L. americanus (Lam), y Ca. L. africanus (Laf). Los síntomas de la enfermedad incluyen la aparición de manchas cloróticas en las hojas, deformaciones y reducción de tamaño en la fruta, además de un sabor agrio en su zumo. Esta enfermedad está causando grandes pérdidas sobre la producción de cítricos de todo el mundo (Wang y col., 2017). La actual dispersión del HLB incluye la mayor parte de las zonas citrícolas de Asia, América y África (EPPO 2019a). Sin embargo, esta enfermedad, aún no se ha detectado en las zonas productoras de la cuenca mediterránea y Australia (EPPO 2019a). Las zonas citrícolas de Brasil y Estados Unidos detectaron en primer lugar al psílido, D. citri, y posteriormente la bacteria (Las) (Wang y col., 2017). Por esta razón, la detección de T. erytreae en la península ibérica en 2014 (Pérez-Otero y col., 2015) alarmó a los productores de cítricos de los países de la cuenca mediterránea, sabiendo que el establecimiento de este psílido, o de D. citri, es un requisito indispensable para el del HLB (Urbaneja y col., 2020a).