El mosquito verde de la vid (Empoasca vitis Göthe) es una plaga polífaga que ha adquirido importancia durante los últimos años. Las larvas y adultos del mosquito verde se alimentan del floema de las hojas causando síntomas de estrés en las hojas (March, 2004). Cuando la densidad de la plaga es alta, puede influenciar en el retraso de maduración y en el contenido de azúcar en las uvas e incluso sobre las características de crecimiento de la propia planta (Reineke y Hauck, 2012). Pirecris ® es un bioinsecticida a base de piretrina natural que ha demostrado ser una válida herramienta para la Gestión Integrada de Plagas (GIP) en la lucha contra el mosquito verde.
El mosquito verde Empoasca vitis es un insecto pequeño de color verde con forma de cigarra (familia Cicadelidae) que mide entre 3-4 mm de longitud. Adultos y ninfas son de aspecto similar, aunque las ninfas tienen un menor tamaño que los adultos y no han desarrollado aún sus alas, por lo que su movilidad es menor. Los huevos alargados y blancos no llegan al milímetro de longitud y suelen estar ubicados en el envés de las hojas, por lo que no son visibles a simple vista.
En cuanto a la dinámica poblacional, suelen presentar un máximo en la primera quincena de agosto, a veces acompañado de otros máximos. Generalmente, predominan las hembras en primavera, se igualan los sexos en verano, dominan los machos en otoño y las hembras de nuevo a principios del invierno (La Spina y col., 2005).
Los adultos de Empoasca Vitis (Göthe) sobreviven al invierno fuera de los viñedos en árboles y arbustos de hoja perenne (plantas hospedadoras invernales). Antes de la inmigración de primavera a las parcelas de vid, los adultos se pueden observar en una amplia gama de plantas caducifolios presentes en las proximidades del viñedo: las plantas hospedadoras intermedias (Reineke y Hauck, 2012).