Los positivos por Xylella fastidiosa en Baleares están causando sorpresa entre los investigadores tras la detección de variedades genéticas de la bacteria nunca antes identificadas en Europa. Las muestras vegetales contaminadas en Ibiza por la subespecie pauca del patógeno pertenecen a una estirpe genética sin determinar, aparentemente cercana pero diferente a la ST73, en la que se habían etiquetado inicialmente.
En cualquier caso, ambos genotipos son distintos del temido ST53, que se ha detectado uniformemente en los olivos del sur de Italia afectados por el llamado ‘síndrome de decaimiento rápido a presencia de esta posible nueva variación de la subespecie pauca de X. fastidiosa en ejemplares de acacia, lavanda, polígala, olivo y acebuche de Ibiza aumenta la incertidumbre sobre la antigüedad, origen y desarrollo de la bacteria en las islas, al tiempo que ofrece nuevos argumentos para refutar cualquier ‘salto’ de la Xylella a las Baleares desde otros puntos de Europa.
La noticia fue avanzada el pasado 10 de mayo en el Foro del Olivar y el Medio Ambiente, del XVIII Simposium Científico-Técnico de Expoliva, celebrado en IFEJA (Jaén), y en el que se centraron las comunicaciones sobre sanidad vegetal del olivo del certamen.
La duda sobre la variedad genética se extiende también a Menorca, donde persiste el interrogante en relación al genotipo ST6, en el que se han adscrito temporalmente los positivos por la subespecie multiplex de X. fastidiosa en olivo, acebuche y polígala.