En Europa, el actual marco legislativo que rige la autorización y comercialización (Directiva 91/414/CEE), y que establece un mercado europeo común para los productos fitosanitarios basado principalmente en el uso seguro de estos productos, ha permitido que los productos fitosanitarios jueguen un papel clave en la agricultura sostenible en Europa. Esta directiva especifica los requisitos que deben cumplir los productos fitosanitarios para su comercialización en los Estados miembro marcando estándares muy elevados en cuanto a salud pública y animal y seguridad medioambiental.

 

En la actualidad, la Directiva 91/414/CEE está siendo revisada por las autoridades competentes de la Unión Europea (UE) con la participación de todos los Estados Miembros, para poder alcanzar los siguientes objetivos:

- reforzar el alto nivel de protección de la salud humana y del medio ambiente.

- mejorar el funcionamiento del mercado interior.

- mantener y reforzar la competitividad de la industria química de la Unión Europea.

- armonizar la disponibilidad de los productos fitosanitarios entre agricultores de los Estados miembros

- reforzar la transparencia.

- evitar la repetición de ensayos con animales.

- actualizar los procedimientos, especialmente para tener en cuenta la creación de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria.

- definir la misión de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria.

Una de las propuestas en esta modificación ha sido la de dividir la UE en tres zonas (Norte, Centro y Sur), asumiendo que las condiciones agroclimáticas son comparables en los países pertenecientes a la misma zona. Con esta división se intenta reemplazar el actual sistema de reconocimiento mutuo descrito en el Artículo 10 de la Directiva 91/414/EEC por un sistema obligatorio de reconocimiento mutuo zonal, en el que se distribuya el trabajo entre los países pertenecientes a cada zona con el fin de evitar la duplicación de trabajo, reducir la carga administrativa de la industria y de los Estados miembro, y garantizar una disponibilidad más armonizada de los productos fitosanitarios, facilitando un reconocimiento mutuo de las autorizaciones de los productos fitosanitarios con lo que se agilizaría el proceso de toma de decisiones.

Hay que tener en cuenta las características propias de la agricultura mediterránea, distinta de la agricultura de los estados del centro de Europa y más aún de los nórdicos. La superficie agrícola de los Estados mediterráneos representa el 40% de la superficie agrícola total europea, con cultivos típicamente mediterráneos como los cítricos, el olivo o el arroz. Si analizamos la cantidad de sustancias activa (kg s.a) usada en las 3 zonas propuestas, un 67% se usa en la zona sur, 30% en la zona centra y sólo 2,4% en la zona norte. Las diferencias más notables se encuentran en las cantidades usadas de fungicidas e insecticidas, un 76% de la cantidad de fungicidas se emplean en la zona sur frente a 23% en el centro y 1% en el norte, en cuanto a insecticidas/acaricidas/nematicidas 80,6% se usa en el sur frente al 19,1% en el centro y sólo el 0,3% se usan en el norte. Más de la mitad del total de los productos fitosanitarios que se consumen en la UE corresponde a los países de la zona Sur, y teniendo en cuenta los tipos de cultivos predominantes en esta zona y sus condiciones agro-climáticas es lógico pensar en una evaluación zonal que permita un reconocimiento mutuo entre los países mediterráneos.

Actualmente, esta iniciativa se desarrolla de forma voluntaria entre los estados miembros del Sur cuyo objetivo es la distribución del trabajo entre los distintos estados de la zona con el fin de evaluar los datos y presentar los informes de evaluación de forma armonizada, aunque la decisión final la debe tomar cada estado de forma individual.

El grupo fitosanitario INIA, del Departamento de Protección Vegetal, viene participando en la evaluación zonal de productos fitosanitarios gracias a una encomienda de gestión con el Ministerio de Agricultura, actual Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

En al año 2004, en Arachova (Grecia), tuvo lugar la primera reunión entre los representantes de los Estados Miembros del Sur con el fin de identificar las áreas y posibilidades de cooperación entre los Estados del Sur, y al mismo tiempo crear un grupo de coordinación cuyas funciones serían las de establecer los ponentes para la evaluación de los productos, coordinar los proyectos de colaboración, y desarrollar los documentos guía de intercambio de trabajo.

En esta primera reunión se tomaron diversos acuerdos para llevar a cabo la evaluación. Actualmente se realizan evaluaciones zonales y no autorizaciones zonales, por lo que la autorización junto con la gestión del riesgo es competencia de cada uno de los Estados Miembro. Cada estado miembro utiliza la evaluación zonal para realizar la autorización, decidiendo las medidas de mitigación de riesgo aplicables en sus condiciones. En esta reunión se crea el Grupo de coordinación "Southern Member States Steering Group"

En la actualidad los países que forman este grupo son: Portugal, España, Francia; Italia; Eslovenia; Grecia; Bulgaria; Malta y Chipre. Desde la primera reunión del grupo de Sur se han mantenido 5 reuniones (Madrid - Junio 2005, Lisboa ? Enero 2006, Roma - Junio 2006; Limassol - Octubre 2006, Liubliana - Junio 2007, Paris ? Abril 2008) en las que se han ido decidiendo los productos a evaluar.

El grupo "Southern Member States Steering Group" es fundamental para la coordinación de las evaluaciones, es presidido por un estado miembro de manera rotatoria cada 6 meses y realiza reuniones semestrales. Este grupo ha realizado un documento guía en el que se explican los detalles de la evaluación zonal. La presentación de los dosieres por parte de los notificadores debe realizarse dos años después de la entrada en vigor de la Directiva de inclusión en el Anejo I. Después de comprobar que el dossier se puede considerar completo documentalmente se inicia la evaluación científica. Al cabo de un año, el país ponente distribuye el borrador del informe de evaluación y se inicia un periodo de comentarios de 2 meses. Los comentarios pueden ser realizados por otros estados miembro, el notificador o terceras partes que lo soliciten. En el plazo de un mes el país ponente evalúa los comentarios y distribuye el informe final de evaluación junto con la tabla de comentarios para que sean usados por las distintas autoridades en conceder la autorización.

En la Zona Sur se han finalizado hasta la fecha 5 informes de registro de productos fitosanitarios de sustancias nuevas y 6 informes de registro de productos fitosanitarios de sustancias existentes, que han sido utilizados en su totalidad o en parte para conceder autorizaciones. Actualmente se encuentran en periodo de comentarios tres informes de registro de productos fitosanitarios de sustancias existentes y se están realizando 9 informes de registro.

El último proyecto iniciado incluye la evaluación de productos de clorpirifos, clorpirifos-metil, mancozeb y oxamyl. Para la evaluación de estos productos se seguirá la aproximación de "risk envelope" o "evaluación globalizada" en la que no sólo se tiene en cuenta el peor escenario en cuanto a exposición sino que se considera el peor caso en cuanto a toxicidad.

La colaboración entre los Estados Miembros del Sur está siendo seguida igualmente por los Estados Miembros del Centro y Norte; y actualmente se están planteando propuestas de colaboración entre zonas para la evaluación de los datos comunes en todos los dosieres. Todas las partes implicadas en el proceso de registro de productos fitosanitarios deberían colaborar para que esta evaluación zonal tuviese éxito, con ello conseguiremos reforzar la posición de la agricultura mediterránea en los foros europeos, aumentaremos la transparencia y la confianza entre los estados miembros y ahorraremos tiempo y recursos humanos y financieros.

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