AEPLA celebró el pasado día 28 de marzo su XXX Asamblea General en Madrid. En esta ocasión se unían varios motivos para la celebración, un aniversario y también para la preocupación, después de las crisis con las que se cerró y empezó un nuevo año. "30 años es una magnífica edad", recordó el Presidente de AEPLA Pau Relat, a los asistentes. Realizó un breve repaso a la historia de los últimos años, recordando, por ejemplo, que en el año 84
eran 74 las empresas asociadas. Después de hacer un recorrido sobre los grandes hitos y temas, Relat concluyó que "después de 30 años, seguimos teniendo los mismo problemas que teníamos entonces" y agradeció la contribución de todos los que han hecho posible la existencia de la Asociación.
Pero, 2007 dio comienzo con la crisis desatada por las alertas destapadas por varios países de la Unión Europea al encontrar residuos de fitosanitarios ilegales en productos vegetales exportados por nuestro país, lo cual ha dañado muy seriamente al conjunto de producciones y exportaciones españolas, y como era de prever, ha acabado provocando efectos negativos para todos, incluida la industria fitosanitaria.
Como ponente invitado, José Ramón Martínez Cano-Manuel, Subdirector General de Medios de Producción Agrícola, ofreció también una conferencia sobre la legislación y reglamentación española y europea que regula el sector fitosanitario, desarrollada durante estos años.
Resumen de 2006
En 2006 el mercado fitosanitario siguió sin recuperarse, con una cifra de ventas que sólo aumentó un 2,55 % respecto al año anterior.
Después del descalabro sufrido en 2005, la recuperación testimonial del 2006 confirma la tesis de que existen causas estructurales, debidas al entorno agrícola en general, y fitosanitario en particular, de más largo recorrido que los puntuales desastres agroclimáticos.
Las principales causas de esta situación, están relacionadas con las políticas agrarias nacionales y de la UE, pero también, con un crecimiento inaceptable del uso de productos ilegales en aquellos cultivos menos dependientes de la PAC y de la dependencia climática, como es la horticultura intensiva.
El entorno reglamentario ha continuado siendo ineficaz y el tráfico ilegal ha seguido aumentando, una pauta en determinados cultivos, con las consecuencias nefastas que ya hemos observado en algunos casos para el valor de la agricultura española.
Un balance, pues, pesimista de un año en que el titánico esfuerzo para que el proceso de autorización de productos funcione de manera razonable en tiempo y forma, no ha surtido por el momento efecto real alguno.
Se siguen esperando soluciones que desbloqueen la situación del registro que hace que las nuevas soluciones para los agricultores no lleguen al mercado por el retraso administrativo que, en algunos casos, supera los 4 años.
El proyecto de AEPLA para el 2007
En 2007 la industria tendrá que estar también muy atenta a la preocupante tendencia de los grandes compradores que están, en medio de la confusión provocada por el tráfico ilegal, creando normas paralelas distintas a las oficiales. Reclamamos y reclamaremos que la administración cumpla con su deber y ponga orden en esta situación que va de mal en peor.
La industria mantendrá el esfuerzo, para defender el modelo de la agricultura integrada, frente a soluciones pasajeras y difícilmente sostenibles, que nos permita ofrecer al agricultor español soluciones, como hasta ahora, durante otros 30 años.
La cifra de ventas de productos fitosanitarios aumentó un 2,55% en 2006
Después del descalabrado sufrido el pasado año, la recuperación testimonial del 2006 indica que existen causas estructurales, debidas al entorno agrícola, y fitosanitario en particular, de más largo recorrido que los puntuales desastres agroclimáticos.
Las restricciones de riego inherentes al período seco en el que estamos, afectó a la siembra y consumo de diversos cultivos, como el maíz, los hortícolas y los cítricos. También se consolidó la reducción, anticipada en 2005, debido a las reformas de la PAC en cultivos como remolacha o algodón, sin definirse todavía, la alternativa de cultivos dedicados a biocombustibles.
La situación de precios de otros, como los cítricos, ha llevado a una reducción clara del empleo de insumos. Finalmente el gran desarrollo del uso de productos ilegales en algunas áreas y cultivos ha supuesto un impacto claro en las cifras, que puede verse agravado si es la propia credibilidad del producto y del productor la que se ve cuestionada por parte del consumidor final, en España o en Europa.
La cifra total de ventas ha sido de 555.705 Miles de Euros. Supone un muy ligero aumento del 2,5 %, respecto al 2005. El comportamiento entre familias de productos ha sido muy desigual, con graves caídas de acaricidas, nematicidas y fitorreguladores, ésta muy relacionada con la crisis de precios de los cítricos. La recuperación de los fungicidas tiene mucho más que ver con el alza de precios de las formulaciones basadas en cobre, debido al encarecimiento de la materia prima, que con el consumo, en un país con más de 3 millones de Has. de viña y olivar. En herbicidas hay una recuperación del consumo, debido a condiciones climáticas relativamente más favorables, indicadas por un aumento claro de herbicidas no selectivos.
Hay que resaltar, finalmente, en cuanto al orden de familias de productos, los insecticidas, tradicionalmente el principal, sigue el tercero en importancia, consolidando un nuevo panorama en el sector.
El mercado por familias
Al igual que durante los dos últimos años, los herbicidas siguen liderando con un 36% el mercado de productos por familias. Los fungicidas se sitúan en segundo lugar con un 25% y en tercer lugar encontramos los insecticidas con un 23% del total del mercado.
Ventas por autonomías
Andalucía sigue a la cabeza de las autonomías con un 31,38% del mercado nacional, seguida de la Comunidad Valenciana con un 14,28% y la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia en tercer lugar con un 10,65% del mercado al igual que el año pasado. En cuarto lugar Castilla León ha sustituido a Cataluña por segundo año consecutivo con el 8,58 % del mercado nacional.
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