El acuerdo comercial entre la Unión Europea y el Mercosur, que incluye a Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, ha soliviantado a los agricultores, que ya se han manifestado en Bruselas y ha anunciado nuevas movilizaciones. El “doble rasero” que aplica la Comisión Europea en las exigencias en materia de sostenibilidad y uso de fitosanitarios es uno de los puntos más polémicos de este acuerdo comercial.
Agricultores y representantes ya han alzado su voz en Bruselas contra el acuerdo comercial, en un acto organizado, entre otras entidades, por el Copa-Cogeca, la entidad que aglutina a las principales organizaciones profesionales agrarias y cooperativas de la UE. “Si los Estados miembro y el Parlamento Europeo lo validan, este acuerdo acarreará consecuencias de gran calado para la comunidad agropecuaria de toda Europa, además de perjudicar a los 450 millones de consumidores de la Unión Europea”, expone esta organización en un comunicado, que señala los sectores que se verán más perjudicados por este acuerdo: la carne de vacuno, la carne de ave de corral, el azúcar, el etanol y el arroz, que “se enfrentan a un riesgo considerable de sufrir una saturación del mercado y pérdidas de ingresos debido a la afluencia de productos a bajo coste procedentes de los países del Mercosur”.
El Copa-Cogeca subraya que los países del Mercosur no han de cumplir con las normas de producción que se exigen a la agricultura europea, ya sea en lo relativo a los productos fitosanitarios, al bienestar animal o a las prácticas sostenibles. Además, “cumplen con normas laborales y de seguridad más laxas, por lo que pueden producir a un menor coste, lo que genera una competencia desleal con respecto a los productores de la UE. La Comisión Europea actúa de forma incoherente. En la legislatura anterior, la Comisión multiplicó las restricciones y normativas aplicables a nuestros productores y ahora, apenas iniciado su segundo mandato, da prioridad a este acuerdo injusto”.
Para Massimiliano Giansanti, presidente del Copa, “La Comisión transmite un mensaje harto preocupante a los millones de agricultores y ganaderos de toda Europa antes incluso de haber presentado su visión para el futuro de la agricultura. Esta situación es particularmente preocupante porque nos hallamos en una fase sumamente delicada de recuperación del diálogo entre los productores agrarios y las instituciones europeas. Los Estados miembro y el Parlamento Europeo deben ahora cuestionar los términos de este acuerdo con contundencia y trabajar en aras de una solución que garantice un planteamiento equitativo y equilibrado para proteger el modelo agropecuario de la UE”.
El presidente de la Cogeca, Lennart Nilson, añade que “los agricultores y las cooperativas agrarias de la UE no se oponen al comercio, sino que abogan por tratados comerciales equitativos, equilibrados y ambientalmente sostenibles. El tratado entre la UE y el Mercosur en su versión actual no cumple con tales principios y se usa al sector agropecuario como una moneda de cambio en beneficio de otras industrias. Desde la Cogeca también instamos a los Estados miembros de la UE y al Parlamento Europeo a posicionarse rotundamente en contra de este acuerdo”.
ASAJA y COAG han convocado un acto de protesta el 16 de diciembre ante el ministerio
En clave nacional, las organizaciones agrarias mayoritarias del sector, ASAJA y COAG, han convocado un acto de protesta el 16 de diciembre ante el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para expresar su malestar por la falta de respuestas eficaces a los muchos problemas que acumulan los agricultores y ganaderos españoles. Entre los mismos, el acuerdo firmado entre la UE y Mercosur. “Si hay un tema que, en estos momentos, supone una verdadera amenaza para nuestro sector ese es la proliferación de acuerdos de libre comercio de la UE con terceros países. Las importaciones de productos agrarios de Mercosur, Chile, Marruecos, Nueva Zelanda…, con precios por debajo de nuestros costes de producción y sin cumplir las normativas que imperan para las producciones comunitarias, impactan gravemente en los agricultores españoles y europeos y provocan pérdidas inasumibles y cierres de explotaciones”, denuncian ambas organizaciones.
La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, por su parte, señala que “este acuerdo puede perjudicar especialmente a las explotaciones de carácter familiar y suponer un freno al necesario y tan complejo relevo generacional”. Unión de Uniones reitera que “el impacto de ponerlo en marcha sin incluir cláusulas espejo crearía una competencia desleal enorme y perjudicaría muy seriamente al sector agrario y ganadero europeo, pero sobre todo, al español”.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, defiende que el acuerdo de la UE con Mercosur “es una gran noticia” que va a beneficiar a las exportaciones comunitarias y “demostrará que Europa está abierta a un comercio internacional, basado en reglas”.