Linkener, compañía de soluciones para el ahorro energético en consumos eléctricos, ha desarrollado una aplicación web que permite a los agricultores controlar el riego desde sus móviles.
La aplicación añade la variable del precio de mercado de la energía eléctrica, que cambia constantemente, y permite rectificar las fechas y horas de programación de riego, lo que es determinante a la hora de evitar penalizaciones a los regantes. De este modo, la aplicación permite ahorros de hasta un 20% en la factura eléctrica.
Los regantes bombean a una balsa de riego que más tarde, y dependiendo de la necesidad de cada agricultor, puede estar regando durante las horas seguidas que necesiten. La gestión de bombas permite determinar el momento en el que los regantes van a realizar esta actividad de llenado de la balsa. “Nuestro sistema permite cruzar la gestión con variables como precios o incluso otras variables de la factura eléctrica, como por ejemplo los periodos”, explica el CEO de Linkener, Sergio Ferrer.
La aplicación mide primero el consumo mediante el cambio a un contador fiscal. En segundo lugar, ubica un actuador a la bomba para poder encender o apagar, situación que va a poder estar controlada desde la plataforma web. Este desarrollo, en el que se han invertido dos años, uno para la propia metodología y otro para la fase de testeo, ya ha sido comercializado. Cuenta con un conjunto de hardware y software y todo el conocimiento que la empresa ha adquirido en el sector eléctrico, así como en la gestión de estaciones de bombeo, ya que desde hace unos meses además es partner de Global Omnium y cuenta con el know-how del grupo en este sector.
La aplicación desarrollada por Linkener permite, mediante una cuota fija mensual, tener cubierto el desarrollo, mantenimiento y contador fiscal. Además de una mayor versatilidad que permite a los agricultores un acceso rápido sencillo y corregible en cualquier momento. “Sobre todo, evita penalizaciones en potencia que es un concepto de suma importancia para los regantes y agricultores, ya que tienen contratadas diferentes potencias eléctricas por horas, y si las programaciones o configuraciones de sus relojes no se ajustan a esas franjas horarias, sufren esa repercusión en la factura eléctrica”, subraya Sergio Ferrer.