Eurosemillas presentó ante un centenar de grandes productores de aguacates californianos y en las instalaciones de la extensión agraria de la Universidad de California Riverside (UCR), la variedad BL516, de flor tipo B, bautizada con el nombre comercial LUNA ucr; al contrario de lo sucede con las otras variedades polinizadoras de piel verde (Bacon, Zutano, Ettinger, etc.), esta da frutos tipo Hass.
La nueva variedad crece en árboles más esbeltos, que ocupan menos espacio, lo que permite plantaciones manejables e intensivas, con mejor aprovechamiento del suelo. Además, en primavera libera mucho más polen que los otros de tipo B y al coincidir hasta seis semanas su floración con la de Hass, logra un mejor cuaje, disparando la productividad de la plantación y multiplicando así los márgenes de beneficio del productor. LUNA ucr es la primera variedad lanzada por la plataforma Green Motion Avocados, pero en los próximos años irrumpirá toda una nueva generación de aguacates que harán más rentable y sostenible este cultivo.
Eurosemillas llegó a un acuerdo con la UCR en mayo de 2019 para desarrollar un programa de mejora en aguacates a partir de la colección de germoplasma que este centro posee, que es la mayor del mundo. Justo un año después, se impulsaba el lanzamiento de Green Motion Avocados, un ambicioso proyecto internacional de I+D+i, cuyas empresas se volcarían en la prueba y evaluación de los materiales seleccionados, además de explotar los derechos de su propiedad industrial. En febrero de 2022 se solicitó la patente de LUNA ucr en EE UU. Actualmente, Green Motion cuenta con veinte empresas líderes en el sector del aguacate procedentes de trece países. Sólo cuatro años después de dar el primer paso, esta variedad se ha comenzado a licenciar ya en California y en poco tiempo llegará al resto del mundo.
En palabras de Javier Cano, director de Green Motion Avocados, “LUNA ucr supondrá una revolución para el agricultor. Nunca se había pensado que una variedad de flor tipo B pudiera ser la variedad principal y que Hass, Lamb Hass o Gem (todas de flor tipo A) actúen como polinizadores. Dejando de lado la calidad de sus frutos, que es equivalente a Hass en tamaño, sabor y vida postcosecha, LUNA ucr es una gran herramienta para modernizar las plantaciones de una forma sencilla. Más árboles por hectárea, más polen disponible, más producción, menos consumo de agua por kilo producido, más rentabilidad”.
El fruto de LUNA ucr tiene la misma calidad gustativa que el de Hass, además de igual tamaño, contenido de pulpa y forma de pera; madura con idéntico color negro, su piel también es rugosa y se pela con facilidad. Las diferencias son imperceptibles, por lo que el precio de comercialización será equivalente. Donde LUNA ucr resulta radicalmente distinta es por sus propiedades agronómicas: es de flor tipo B; frente a las enormes copas que complican su recolección y manejo, tiene árboles de tamaño pequeño o medio; Hass crece a lo ancho, mientras que LUNA lo hace en sentido muy vertical, características que disparan las posibilidades para producciones más intensivas y para trabajar con diferentes sistemas de polinización. Además, LUNA ucr tiene una producción regular, más consistente y sus frutos maduran en el interior, están más protegidos de inclemencias que los Hass, que lo hacen más al exterior del árbol. Las pruebas comparativas realizadas por la UCR confirman que esta variedad permitirá multiplicar los rendimientos y la rentabilidad de las actuales plantaciones de Hass.
Tras lanzar esta variedad, la plataforma Green Motion Avocados tiene ya seleccionada una segunda más tardía y otra más precoz que Hass, que lograrán ampliar el periodo de recolección casi dos meses. En los próximos años también se lanzará un cuarto aguacate que se venderá como fruta gourmet por su excepcional sabor. De igual manera, se trabaja en cinco patrones: uno permitirá árboles más pequeños, otro se adaptará mejor a zonas con problemas de salinidad y otros tres ofrecerán mayor resistencia a la pobredumbre causada por la fitóftora (un hongo muy común que ataca las raíces) y al estrés hídrico. “Se mejorará la oferta en calidad y en cantidad, se podrán ampliar las zonas aptas para el cultivo y se logrará hacerlo con una menor huella hídrica y ambiental”, concluye Cano.