Tras completar la adquisición en 2017 de una parte importante de los activos de protección de cultivos de DuPont, lo que la sitúa entre las cinco primeras empresas del mundo en sanidad vegetal, FMC Agricultural Solutions acaba de presentar a su red de distribución en España la nueva dimensión de la compañía, su nuevo catálogo y su estrategia de cara al futuro.
Cerca de trescientos clientes de la compañía han participado en las cuatro jornadas de presentación celebradas en Valladolid, Zaragoza, Murcia y Sevilla. En ellas se ha destacado, en primer lugar, el nuevo catálogo de que dispone FMC Agricultural Solutions para el mercado español, que incluyen especialidades en cultivos tan importantes en España como hortalizas, frutales, cereales, maíz u olivar.
FMC ha incorporado a su catálogo actual marcas de reconocido prestigio en el mercado español, como los insecticidas Steward®, Altacor® y Coragen®, los herbicidas para cereal Granstar®, Biplay® y Tripali® así como otros productos consolidados como Venzar® Debut® o Harmony®. Las nuevas marcas de la empresa se suman a otros referentes como Impact®, Rufast®, el insecticida de referencia en olivar Danadim® Progress, así como los herbicidas Command® o Spotlight®.
En un comunicado, FMC Agricultural Solutions destaca que “tan importante como tener un catálogo potente y con soluciones para todo tipo de cultivos en todas las zonas agrícolas de España, es tener el potencial innovador suficiente para desarrollar nuevos productos más sostenibles y eficaces de cara al futuro”. En este sentido, la empresa ha reforzado su potencial de I+D con una inversión anual cercana al 8%.
La nueva FMC Agricultural Solutions cuenta con 23 centros de I+D en todo el mundo, uno de ellos en Chipiona (Cádiz). De los 5.400 empleados de la compañía a nivel mundial, más de ochocientos trabajan en I+D. Actualmente, cuenta con quince nuevas materias activas listas para iniciar su proceso de registro, “lo que supondrá poder disponer de productos de última generación en el medio plazo”. Además, la compañía cuenta con una colección de 1,8 millones de sustancias activas susceptibles de ser empleadas en agricultura, con las que investigar y poder desarrollar nuevas soluciones para la protección de las cosechas.